Los dos grandes del fútbol español se están aburriendo en el torneo local, dicho esto sin intentar desmerecer a los demás competidores. Pero que alguien se atreva a decir lo contrario: Real Madrid y Barcelona van camino a repetir lo del año pasado, o incluso a intentar mejorar el récord de puntos, y probablemente el tercero en la tabla termine a más de 20 puntos de distancia.Así como está planteado, el campeonato español es hoy para ellos un entrenamiento para la UEFA Champions League. Algo así le sucedía al Ajax en la época en que dominaba el fútbol holandés, donde su liga era la manera de prepararse para ir a la conquista de Europa.No me canso de decir que el fútbol, cuando es demasiado fácil, termina volviéndose chato e insulso. Y eso es lo que quedó como saldo de las últimas presentaciones del Real Madrid y del Barcelona. Afortunadamente, ahora les llegó el turno de medirse entre ellos, y es en estos partidos donde, a falta de otros rivales, cada uno tendrá que sacar lo mejor de sí para quedar bien posicionado rumbo al título.
Mourinho y una gran disyuntiva: atacar o cuidarse.El partido del tiene, para mí, un gran interrogante, y es qué hará Mourinho con respecto al sistema táctico.A mi entender, hay un solo camino para el técnico luso, y es el mismo que viene recorriendo desde que llegó al Bernabeu: para el Madrid no hay otra opción que salir a ser protagonista.Claro que muchos pueden argumentar que esa actitud puede ser suicida ante el Barcelona. E incluso, podrían traer a colación el antecedente del Inter 2009-2010: el multicampeón, dirigido justamente por Mourinho, le encontró la medida al blaugrana con un juego ultraconservador.Pero si hay algo que queda claro tras la última década de fútbol europeo es que Mourinho no tiene un pelo de estúpido. Ese planteo con el Inter era más que aceptable, ya que en Italia, salvo por el AC Milan o la Juventus, en general no se ataca con tanta convicción. El Inter es, por historia, un equipo contragolpeador.Esa no es la realidad del fútbol español y menos aún la del Real Madrid, que no sólo tiene la obligación histórica de salir en cada partido a dominar, sino que además tiene plantilla de sobra para hacerlo. Piensen en los nombres, línea por línea, del equipo blanco, luego súmenle a un Kaká lesionado pero que en algún momento volverá al campo, y verán que no hay mucha elección.No tengo dudas: Mourinho no puede ponerse en una situación de espera. Porque además, el riesgo de perder siempre lo va a correr, pero será muy distinto que lo haga saliendo a atacar que adoptando una actitud timorata. Cada uno con su estilo, ambos saldrán a ser dominadores.Xavi no sólo crea ocasiones: también puede definirlas. El Barcelona querrá, como siempre, adueñarse de la pelota y manejarla con sus tiempos y con su ritmo. Real Madrid tratará de no permitirlo, y para eso tiene que salir a presionar, para dejar en claro que si Barcelona consigue imponer su juego es por méritos propio y no por concesión de su archirrival.Claro que Real Madrid tiene lo suyo para llevarse el clásico. Cuando recupera el balón, busca golpear enseguida, con un juego muy vertical. Para la defensa del Barcelona, que no se caracteriza por su velocidad, esto puede ser un problema, sobre todo si queda con muchos espacios y desacomodada.Ante el vértigo vertical, Barcelona propondrá la circulación horizontal, con un ataque más pensado y más pausado, tratando de encontrar ese pequeño espacio para llegar a la conclusión de una maniobra que puede haber empezado unos 40 pases antes. Para más referencias, recordar a España campeona del mundo en Sudáfrica. Las similitudes no son casuales, ya que la base de La Furia es catalana.Por otro lado, a la hora de la concreción también hay diferencias marcadas: Real Madrid tiene un punto de referencia en el área, mientras que Barcelona no. Mientras que para los de Mourinho Higuaín es el faro guía, lo que los hace más predecibles, en los de Guardiola llegan Messi, Villa, Iniesta, Xavi y muchos más a esa zona clave, y lo hacen de frente, de afuera hacia adentro, con centro atrás y muchas variantes más.Real Madrid tendrá que ser capaz de reducir a un mínimo esas variadas posibilidades que tiene el Barcelona para ponerse en situación de gol. Si lo consigue y, además, recupera rápidamente y ataca con precisión, también tiene nombres de temer. Con un esquema similar al del Inter, aunque con otra actitud, Ozil, Di María, Cristiano Ronaldo e Higuaín pueden conseguir lo que en la primera mitad de año lograron Sneijder, Pandev, Eto'o y Milito.El recuerdo de aquellos partidos de semifinales de la Champions seguramente estará presente. Ya entonces vivimos un duelo táctico apasionante, aunque aquella vez el espectáculo no fue de primera por el esquema defensivo que adoptó Mourinho.Ahora, con un Real Madrid obligado a salir a buscar el partido con una propuesta mucho más agresiva, la promesa de buen fútbol es aún mayor.
Pick: 2 Odds: 3.85 Stake: 15 Result: 5-0 Total: -15 €
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